lunes, 26 de octubre de 2009

Historia pequeña de rayos de luz que puede ser tan enorme muchas veces.~

Había dos siluetas... eran como dos sombras...
Apenas se rozaban con sus dedos índices... se tocaban la cara... dibujándoselas...
Luego se empezaron a dibujar otras partes. El cabello, el torso, los brazos. Las piernas, rodillas y pies. Todo con detalles.
Y del vientre algo comenzó a salir... algo como una energía rara. Algo extraño, fuerte, que ligaba a las dos sombras. Como una luz. Un rayo de luz. Uno era amarillo. El otro creo que también. Y se seducían, se tocaban... Eran sólo luz. Espesa en el aire. Luz.
Y una vez que se tocaron, era complicadísimo separarse.
Y una vez que se separaron, dejaron una marca.
Y una gota de luz amarilla clara se cayó.
Era una mezcla entre dos amarillos perfectamente combinados.
Y de esa luz, algo se dibujó.
Una cara.
Y también otras partes.
El cabello, el torso, los brazos. Las piernas, rodillas y pies. Y nuevamente con detalles. Hermosos detalles.

Y los tres rayos de luz se miraron, asombrados.
Y rieron.~

martes, 13 de octubre de 2009

No more calendars.

-¿Qué te pasa?
-Nada.
-Tenés ojos de silencio.
-¿Silencio?
-Tenés ojos de humo.
-¿De humo?
-Tenés ojos de muerte.~

lunes, 12 de octubre de 2009

Filippo, el joven mirón.~

(No sé si alguna vez tardé tanto en escribir algo... Me faltaba una parte, no la encontraba. No la busqué tampoco, la esperé. Ahí va...)



Filippo no entendía. No comprendía cómo aquello que estaba espectando podía resultar tan perfecto. Desde las raíces, paseaban sus ojos, recorriendo el tallo y las hojas, tan firmes como hacía quince años. Y hacía quince años él apenas si nacía.
La persiana americana, negra y torcida, lo ocultaba. Y él se sentía como cuando pequeño, al mirar películas de Isabel Sarli, perseguido por otros ojos. Algo estaba haciendo mal, algo no era correcto.
Pero no podía apartarse. Él la seguía estudiando, contemplando.
"Nunca pensé en ver a Margarita de esta manera" pensó.
"Qué ganas de morderle la piel... Qué ganas de tocarla..."

Y fue tal la magia que desprendía el vil cuerpo de ella. Y tal fue, también, la precisa recepción en la mirada de Filippo...
Y tal fue, además, la perfección de la luz, tan poca como nieve en primavera patagónica...
Que aquel muchachito se inquietó al vislumbrarla.
Y tanto, tanto se inquietó, que se le juntaron las pestañas.
Y fue todo muy exacto. Y me cansé de escribir la letra Y. Esa letra no me gusta. Me hace sentir muerta por dentro. Y demasiadas muertes hay ya, en este cuentito, como para andar por ahí, derrochándolas.~

jueves, 1 de octubre de 2009

ODIO A LOS PROFESORES!~

Los profesores tienen esa MALDITA capacidad de entusiasmarte y desentusiasmarte en lo que va medio segundo de clase. Hoy (quizá mañana no) puedo afirmar, con toda la bronca y mala onda del mundo (con la de todos los argentinos, bastaría y sobraría) que ODIO profundamente a los profesores. No me importa ni me jode que no me aprueben. Lo que me INDIGNA... ES QUE GENERALICEN!
Ya sé, ya sé, no pueden ir banco por banco y decir "vos charlaste en clase, vos no charlaste en clase" o sea, lo sé, somos bastantes en el aula. Pero me pone del clítoris el hecho de haber PRESTADO TODA mi atención, haber escuchado las completamente INSULSAS palabras (acerca de un poema del cornudo de Becquer) de una compañera tonta que no es tonta pero le gusta serlo entonces se hace la tonta, haberme comido el garrón UNIVERSAL de bancarme a las tres minas más idiotas del curso (que no son más idiotas, porque más idiota no está de moda), y haber fotocopiado cuatro poemas DE MIERDA del nuevamente cornudo de Becquer (que me chupa un ovario si el mono era buen escritor, para mí era un romántico pedante del orto, y eso es porque tengo bronca) cuando PODRÍA HABERME QUEDADO TOMANDO MI GASEOSA CON MIS COMPAÑERAS QUE SE SACARON UN UNO, PARA QUE TOTAL LA ESTÚPIDA DE LA PROFESORA (que encima es reemplazante, y ya tiene un punto en contra) DIGA QUE NADIE LA ESCUCHÓ, QUE NADIE MÁS QUE LA TONTA DEL CURSO (la chica esa que le cabe ser tonta) HIZO EL EJERCICIO Y QUE LAS DEMÁS (hay un solo varón en mi curso, entonces tienden a generalizar en femenino) NO HICIMOS NADA! ES UNA IMBÉCIL!
ENCIMA UN POEMA DE BECQUER, GANAS DE MATARLA TENGO.


...pedazo de conchuda...