domingo, 5 de abril de 2009

Mi alma pordiosera, demás yerbas.


Ahora mi alma está sin techo. Hace malabares en la esquina por dos miradas con cincuenta, que salen de tu buena educación. Con suerte. Mi alma está pobre. Dice que la echaste de tu empresa, y está desprotegida. Mi alma a veces te putea. Dice que "¿cómo puede ser? Un hombre tan #*@¬&! que se #*@¬&! tanto en la gente. Que sea demasiado #*@¬&!... No puede ser."
Eso dice ella, se ve tan mal últimamente. Está hecha una pordiosera. Un desastre. Y vos me dijiste que era un desastre necesario, y hermoso, escandaloso, apasionante. Pero un desastre al fin. Y yo hablo bien con vos, intento arreglar las cosas. Yo, el cuerpo, hago de intermediario, para ver si mi alma y vos concilian armonía. Aunque más que armonía, mi alma quiere tu alma. No tu cuerpo, tu alma. Yo podría querer tu cuerpo -y entre nos, creo que tu cuerpo es tan atractivo como vacacionar en el exterior-, pero no, ella no lo quiere, porque no lo necesita. ¿Qué haría mi alma con tu cuerpo? Quiere a tu alma. Es que, tu cuerpo no siente nada por mi alma -menos por mí, atino a afirmar-, es tu alma la que deja a la mía tan mal. O la mía dejó mal a la tuya. Puede ser. Pero, señor, me animo a causa de la imagen que me parte en dos cada vez que veo a mi alma destruida, pero me animo: ¿No podría darle otra oportunidad? No le fallará... ~

4 pensantes:

Lolítica dijo...

Qué bueno es saber que hay alguien del otro lado del monitor que piensa como yo.

Te agradezco, corazón.

Jugenia dijo...

Pérez = a 14 km del centro de Rosario. Gente tranquila, pueblo lindo


Era yo de pequeña 8se notan los estragos de los años y el cigarrillo) :P jajaja

Grettel J. Singer dijo...

chiquita linda, me sorprenden tus pensamientos ingeniosos.
te dejo un beso enorme.

eliú dijo...

"...Ahora mi alma está sin techo..."

seguro muy como la mía